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La nueva funcionalidad de recuperación basada en IA de Windows 11 ha generado importantes preocupaciones entre los expertos en seguridad. Anunciada durante la conferencia Build, la herramienta toma capturas de pantalla continuas de las actividades de los usuarios.
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Aunque Microsoft garantizó el cifrado de datos para proteger la privacidad, un investigador señaló graves problemas de seguridad. Kevin Beaumont, un experto en ciberseguridad, probó la nueva funcionalidad y la describió como un “desastre de seguridad”.
Según él, los datos del usuario se almacenan en texto plano en una base de datos SQLite, ubicada en la carpeta del usuario. Esto permite a posibles piratas informáticos, que utilizan malware, acceder a esta información.
Experto “probó” el error de Microsoft
Microsoft declaró que los piratas informáticos no pueden acceder a los datos de forma remota, ya que están almacenados localmente y encriptados. Sin embargo, Beaumont cuestionó esta afirmación, demostrando que se puede acceder a la base de datos incluso sin privilegios administrativos y exfiltrarla de forma remota a través de archivos AppData.
Para validar sus preocupaciones, Beaumont extrajo datos de una versión preliminar de la funcionalidad y desarrolló un sitio web para probar la búsqueda de la información contenida en los archivos. Deliberadamente no compartió los detalles técnicos del proceso de infiltración automatizado, a la espera de una respuesta de Microsoft.
Beaumont sugirió que Microsoft debería pausar la implementación de esta funcionalidad debido a posibles riesgos de seguridad. La compañía aún no ha respondido a las inquietudes planteadas, pero informó que la recuperación es opcional y los usuarios que no se sientan cómodos usándola pueden desactivarla.
Está previsto que la funcionalidad se lance el 18 de junio en PC con Copilot+.
Fuente: Tecnología WCCF
